Diego Lerner, uno de los ejecutivos más influyentes en la expansión de Disney en América Latina y en la región EMEA, falleció tras una prolongada enfermedad. Con casi 35 años de trayectoria en la compañía, su gestión dejó una marca profunda en la consolidación de negocios, la producción de contenido local y la adopción de tecnología como eje narrativo.
Nacido en Buenos Aires y formado como abogado en la Universidad de Belgrano, Lerner fue pionero en la apertura de las primeras oficinas de la compañía en América Latina a comienzos de los años 90. Desde entonces lideró la creación y expansión de múltiples operaciones en la región, incluyendo México, Brasil, Colombia y Argentina, y fue responsable del lanzamiento y consolidación de la TV paga y de los distintos Disney Channels en la región.
En sus distintos cargos de liderazgo —entre ellos presidente de The Walt Disney Company Latin America y, entre 2009 y diciembre de 2017, presidente de The Walt Disney Company EMEA— supervisó la distribución de películas, la diversificación de modelos de negocio y la localización estratégica de contenidos para más de cien países. Durante su mandato en EMEA, la empresa experimentó un crecimiento sostenido y un aumento de la afinidad de los consumidores con las marcas.
Lerner impulsó acuerdos clave que fortalecieron la posición de la compañía en el mercado deportivo latinoamericano, participando en la fusión entre ESPN y Fox Sports y en la negociación de contratos de transmisión de fútbol vigentes hasta 2030. También fomentó alianzas con la industria local, como la estrategia de contenido iniciado con Patagonik Film Group en 1997, y promovió la innovación tecnológica aplicada a formatos y distribución.
Su influencia abarcó la supervisión de operaciones de televisión, video y distribución cinematográfica, la creación de nuevas unidades de negocio y la coordinación con áreas como experiencias y parques en su apoyo regional. Reconocido por su mirada estratégica, cercanía personal y capacidad para anticipar cambios en el consumo global, Lerner continuó vinculado a proyectos de la compañía incluso durante su internación. Semanas antes de su fallecimiento fue nombrado presidente honorario en reconocimiento a su contribución.
Dejó además un legado en la profesionalización y localización de la industria audiovisual en América Latina, con impactos en la estructura del negocio, la oferta de entretenimiento y la apertura de mercados. Es recordado por sus colegas por su liderazgo y por haber sentado las bases de un modelo de crecimiento que combinó contenidos de alta calidad, innovación tecnológica y expansión internacional.





